TURISMO EXPRESS: Roma y el Vaticano en un día (parte I)

Confieso que no soy muy fan de visitar las ciudades a todo correr sin disfrutarlas como es debido y en tiempo récord, pero soy consciente de que en ocasiones ya sea por tiempo, por dinero o porque vamos retrasados en el viaje, no queda otra opción. Por ello inauguro esta nueva sección en la que propongo rutas que permiten ver capitales y grandes ciudades en 24h, para aquellos que no dispongan de los tres o cuatro días ideales para conocerlas. Empezamos por Roma, la Ciudad Eterna, con tantas cosas para ver que es misión imposible verlo todo en un día, pero allá va lo más esencial, junto con un par de aclaraciones sobre los puntos de interés.

ANTES DE EMPEZAR

♣ Si vas a utilizar el metro (ya sea para desplazarte desde tu hotel/hostal al centro, para volver o para hacer varios tramos de la ruta en transporte público en vez de andando), tal vez te convenga adquirir el billete de metro de 24h por 6€. El billete sencillo cuesta 1'5€, por lo que cada uno verá si le sale rentable o no. Preguntad en vuestros hostales si también lo venden, el mío lo hacía y me salió por 4€.

♣ Ojo con los buses en Roma. Si sabes cuál quieres coger y tienes la certeza de que te llevará al lugar indicado adelante, pero hay tantos (más de 1000 líneas, según me han dicho) que si no tienes mucha idea es mejor que optes por el metro para desplazarte por el centro, aunque...

♣ Relacionado con lo anterior, en Roma la inmensa riqueza arqueológica aún sin descubrir impide la construcción de líneas de metro. Es por ello que solo hay dos líneas y los metros siempre van abarrotados de gente. Al reservar alojamiento asegúrate de que hay una estación de metro cerca. En su defecto, infórmate bien en recepción sobre cuál es el bus que debes coger.

♣ Tened precaución con los carteristas, yo tuve suerte pero por lo visto no son pocos los turistas a los que les desaparecen cosas del bolso/mochila de repente sin siquiera notarlo. 

♣ He aquí un mapa de la ciudad y otro del metro.

♣ Yo misma he realizado casi este mismo recorrido durante mi viaje más reciente, así que sí es posible ver todo esto en un día, pero repito, ni de lejos basta un día para visitar la ciudad en condiciones. Yo ya había estado de antes y por eso decidí darle solo día y medio, medio día para entrar al Coliseo, el Foro y el Palatino y un día para lo demás.

♣ Leyenda: monumentos y puntos de interés en negrita, calles y direcciones en cursiva.

POR LA MAÑANA

Nuestra ruta empieza en la Piazza del Popolo, al norte de Roma. Para llegar a ella la línea de metro A nos deja en la estación Flaminio, desde la cual es muy fácil llegar a la plaza, a la salida verás una iglesia, la Basílica Santa Maria del Popolo. Tal vez te suene dicha basílica del libro o la película "Ángeles y Demonios" de Dan Brown, la capilla Chigi, en el interior, es el primer altar de la ciencia, el correspondiente con la Tierra. 

Santa Maria del Popolo, fuente: arqhys.com

Obelisco

Fontana della Dea di Roma, en un extremo de la plaza

Salimos de la plaza por detrás de la Fuente de Neptuno y caminamos por la Via Ferdinando di Savoia hasta llegar al Ponte Regina Margherita. Lo cruzamos y siguiendo la Via Cola di Rienzo en unos 20 minutos veremos los muros de la Ciudad del Vaticano. En total se necesita alrededor de media hora para ir desde Piazza del Popolo hasta la Ciudad del Vaticano, por lo que el metro puede ser una opción más rápida (subirse en Flaminio y bajarse en Ottaviano).

La entrada a la Piazza San Pietro y la Basílica es gratuita, por subir a la cúpula y por entrar a los Museos Vaticanos hay que pagar y hacer cola, por lo que no los incluimos en esta ruta, pero no por ello dejan de ser recomendables si dispones de algo más de tiempo en la Ciudad Eterna. 

Basílica de San Pedro

Interior de la Basílica

Interior de la Basílica

La Guardia Suiza, cuyos uniformes fueron diseñados por Miguel Angel y aún siguen en uso

Columnata y cúpula

Basílica y obelisco

La plaza diseñada por Bernini también es un altar de la ciencia en "Ángeles y Demonios", el segundo, el del Aire.

Escultura del Aire

Abandonamos el Vaticano por el extremo abierto de la plaza y caminamos por la Via della Conciliazione, la cual nos llevará al Castel Sant'Angelo y al famoso puente con estatuas, Ponte Sant'Angelo. El castillo fue construido en la época romana y ha cumplido innumerables funciones desde entonces, desde mausoleo hasta prisión. Hoy en día es un museo. 

Castel y Ponte Sant'Angelo

Ponte Vittorio Emanuele II y cúpula de San Pedro

Seguimos el curso del río Tiber dejando atrás el Vaticano hasta el siguiente puente, el Ponte Umberto I. Sin cruzar el puente, giramos a la derecha por la calle de enfrente (Via Giuseppe Zanardelli), adentrándonos una vez más entre casas. Al llegar a la Piazza delle Cinque Lune volvemos a girar a la derecha y nos encontraremos en la Piazza Navona, antiguo estadio romano. Hoy en día la reúne la iglesia Sant' Agnese in Agone, la Fuente de los Cuatro Ríos de Bernini (cuarto y último Altar de la Ciencia, el del Agua) y varios edificios de interés cultural.

Fuente de los Cuatro Ríos

Piazza Navona

Dirigiéndonos al sur y girando a la izquierda al llegar al Corso Emanuele II, nos encontraremos varias ruinas romanas en el Largo di Torre Argentina. Contiene restos de edificios republicanos (el teatro de Pompeyo, varios templos, etc.). 

Largo di Torre Argentina

Nos dirigimos del nuevo al norte por cualquiera de las calles al norte de la plaza en la que estamos (Via di Torre Argentina o Via dei Cestari) hasta divisar el famoso Panteón de Roma. Construido hace casi 2000 años por los romanos, es una auténtica obra maestra arquitectónica. Su cúpula, a sus 1900 años de edad se mantiene en perfecto estado a pesar del tiempo y los terremotos que sufre Italia, además de ser más ancha que la de la Basílica de San Pedro. Los muros de la cúpula llegan a tener 6m de ancho en su base para hacerse más finos y ligeros en la parte superior, donde al final tiene un agujero que irónicamente da estabilidad a la construcción. Se dice que en el interior del Panteón entraría una esfera perfecta, ajustándose exactamente con la cúpula y llegando hasta el suelo. Las columnas son monolitos de granito que se trasladaron desde Egipto en barco.

Es uno de los pocos edificios romanos que quedan en pie, lo que se debe a que los cristianos se apropiaron de ella para emplearla como iglesia en vez de destruirla y reciclar sus piezas como hicieron con la mayoría de los demás edificios de la época. Sin embargo, los adornos paganos si que fueron retirados y utilizados en construcciones cristianas. Por ejemplo, la placa de bronce que antes adornaba el friso fue fundido y hoy en día dicho bronce se encuentra en la Basílica de San Pedro. A día de hoy sigue siendo una iglesia y alberga la tumba de Rafael.

Panteón

Tumba de Rafael

Interior del Panteón

La plaza delante del Panteón se llama Piazza della Rotonda, y si saliendo desde ahí tomamos la Via dei Pastini, acabaremos llegando al Templo de Adriano. Dicho templo no se ha mantenido en tan buenas condiciones como el Panteón (de hecho hoy en día solo son visibles unas columnas) porque los cristianos no la adoptaron como templo, en vez de ello utilizaron muchas de sus piezas para la construcción de iglesias y demás edificios de la nueva Roma. Los agujeros que presentan las columnas se deben a que en la Edad Media el hierro escaseaba, y la gente, sabiendo que en el interior de las columnas podrían encontrar algo, cavaron en ellas. 

Templo de Adriano, o lo que queda de él

Seguimos la Via di Pietra, cruzamos la Via del Corso y por la Via delle Muratte terminaremos en la fuente más famosa y concurrida de Roma, la Fontana di Trevi. En un principio era una fuente normalilla como cualquier otra, pero empezaron a adornarla y así quedó:

Fontana di Trevi

Fontana di Trevi

Si habéis salido del hotel/hostal relativamente temprano será la hora de comer. La zona está repleta de restaurantes (si puedes permitírtelo), pero mucha suerte encontrando algo barato para comer en los alrededores, seguro que Tom Cruise graba la siguiente de "Misión Imposible" relacionada con este tema.  De todas formas algún puesto digno de pizza tiene que haber. 

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